Sinopsis

Una mujer dividida entre dos hermanos y un trono: ¿elegirá la venganza o al hombre del que nunca debió enamorarse?

Ella no le pertenece a él. Pertenece a la corona.

El trono nunca fue el destino de Tristan Faasa. Eso quedaba para su hermano, Michael, el mismo que fue responsable de la infancia atormentada de Tristan y de la cicatriz que le cruza la cara. Tras la muerte de su padre, Michael está decidido a subir al trono, y Tristan, a robárselo: como líder de una rebelión secreta, no se detendrá ante nada con tal de poner fin al reinado de su hermano. Pero la llegada de Lady Sara Beatreaux, la prometida de Michael, hace estallar otro tipo de guerra, una en la que Tristan ya no sabrá qué le importa más, si la corona o la mujer que está a punto de ceñirse las sienes con ella.

Sara tiene un plan: casarse con el rey y acabar con la dinastía Faasa, aunque eso ponga en peligro su propia vida. Pero no contaba con el Príncipe Marcado. Es peligroso. Está fuera de su alcance. Es uno de los hombres a los que tiene que matar. Pero la frontera entre el odio y la pasión nunca ha sido tan delgada y, cuando los secretos salen a la luz, Sara ya no sabe en quién confiar, desgarrada entre la venganza y el villano al que no debería amar.

¿Por qué lo hemos leído?

Nos apetecía un dark romance, y como Hooked cumplió con lo que pedíamos, decidimos darle una oportunidad a Scarred porque teníamos mucha curiosidad en ver cómo se desarrollaba esta historia basada en el Rey León.

Pero lo que comenzó como una lectura conjunta acabó como una lectura en solitario, ya que A. me abandonó miserablemente porque se negaba a continuar con esta historia…

Reseña

Sara lleva toda la vida preparándose para acabar con la dinastía Faasa porque son los culpables de la muerte de sus padres. Para eso, su intención es casarse Michael, el heredero al trono, y destruir desde dentro a toda su familia.

Por otro lado, Tristán, el hermano pequeño de Michael también piensa acabar con él. Le hizo la vida imposible y lleva años alimentando una rebelión que lo colocará a él como futuro monarca.

Ambos tienen el mismo objetivo pero el odio hacia el rey no es lo único que tienen en común. 

La trama está muy clara, el objetivo es matar al rey y el motivo es la venganza. 

Al principio parecía muy interesante porque todo lo que tenga que ver con reyes, secretos, rebeliones, rivalidad entre hermanos, amores prohibidos… son clichés que nos encantan, peeeero, lo que parecía interesante se convirtió en aburrido.

Para ser un libro donde el plan principal de los protagonistas es traicionar, no los he visto muy inteligentes ni preparados. Sus artimañas me han parecido pobres y sus razonamientos absurdos. 

La ambientación tampoco me ha gustado.

Cuando leí Hokeed me encantaron las referencias a Peter Pan, pero en este, las alusiones al Rey León brillan por su ausencia. Me han parecido tan pocas y tan metidas con calzador que ha sido hasta ridículo. 

Además, se supone que están en 1920 y lo se porque lo dicen, pero podrían estar en 2097 o en 1298 que daría igual. Lo que hay alrededor no tiene importancia y el vocabulario que se utiliza no es adecuado. No me he creído nada.

Al tratarse de capítulos cortos y de dos POV, el ritmo es ágil.

Es posible también que terminara el libro pronto porque hubo párrafos enteros que me salté porque no estaba pasando nada. 

No sentí intriga ni tensión sexual, que es lo fuerte de este género. Las escenas spicy me parecieron forzadas pero no por violencia ni por agresividad (ojalá), sino porque están metidas con calzador y leerlas era un esfuerzo.

Y es que la relación entre los personajes no dice nada. Son de una manera porque lo dice el texto, pero no por lo que hacen.

Sara es más insulsa que un bocata de avena. Se supone que va allí a buscar venganza y en realidad no hace nada relevante. No es inteligente, ni tiene un plan, ni se entera de nada… 

Y Tristán más de lo mismo. Hace cosas malas porque se supone que le han hecho mucho daño, pero luego él hace lo mismo con los demás. No tiene trasfondo y su motivación carece de interés.

Los personajes secundarios están de adorno. Interactúan con los protagonistas para dar justificación a sus actos pero no tienen personalidad ni historia. Es más, son bastante incongruentes.

Y si estáis esperando algún plot twist sorprendente que os deje con la boca abierta, os diré ya de antemano que no lo vais a encontrar. Es lineal como la autovía de Madrid a Zaragoza, y aunque al final parece que algo se pone interesante, no dura ni un capítulo. 

En fin, como podéis leer, este libro no ha sido para mi. 

Me ha decepcionado muchísimo porque Hooked me gustó bastante por lo original que es, pero en este no he visto referencias al Rey León y la parte de dark romance no es interesante.

No he sentido intriga, ni tensión sexual, la ambientación me ha parecido pobre, no hay ni medio plot twist  y los personajes son simples e incongruentes.

Para mi ha sido un NO  en toda regla.

Y vosotros, ¿Lo habéis leído? ¿Qué os ha parecido? Os leemos en comentarios y en nuestras redes sociales.

M🔴