
Sinopsis
Londres, 1895. Todo indicaba que podría ser una noche más en la Academia Covenant, cuando Eliza Kyteler y Kate Saint German, dos jóvenes Sangre Negra, deciden despertar a todos los muertos del cementerio Little Hill. Lo que parecía una simple travesura, se convierte en una expulsión definitiva de la Academia Covenant. Ahora, lo único que le queda a Eliza es ser presentada en sociedad y encontrar al marido perfecto. Dos cosas que, por más que sea la prioridad número uno de sus tíos, es la última en la lista de deseos de Eliza. Pero mientras sus días comienzan a transcurrir entre llamativos vestidos, telas caras y bailes en donde todo lo que brilla parece ser oro, una oscura amenaza comienza a crecer en los rincones más oscuros de Londres. Veintisiete años después del asesinato de los padres de Eliza, la muerte vuelve a azotar a los Sangre Negra. Y cada víctima aparece en un estado más macabro que la anterior. ¿Quién está detrás de los asesinatos de los Sangre Negra? ¿Cuál es la amenaza que pone en peligro tanto a los brujos como a los no mágicos?
¿Por qué lo he leído?
Este libro lleva en mi lista de pendientes tanto tiempo que me da vergüenza hacer cálculos. Tenía muchas ganas de leer a la autora porque me habían hablado muy bien de ella, además, esta historia tiene secretos, asesinatos y brujas, ¡BRU JAS!. Nada malo que decir.
RESEÑA
Eliza es expulsada de la academia Covenant por despertar a todos los muertos de un cementerio junto con su prima Kate.
Como castigo, sus tíos la obligan a entrar en sociedad a base de fiestas con el único objetivo de encontrar marido, cosa que odia con todas sus fuerzas.
Entre baile y baile, ocurren una serie de crímenes similares a los que ocurrieron hace veintisiete años, cuando asesinaron a los magos más poderosos de su época, sus padres.
El culpable de sus muertes está en una cárcel mágica de alta seguridad y los rituales que realizan son macabros y prohibidos, así que la trama consiste en descubrir por qué la historia se repite y quién está detrás de estas muertes.
Al tratarse de una investigación, el misterio y la intriga son la base principal del argumento, y aunque tiene toques de magia, para mí ha sido más un thriller que un libro de fantasía.
El romance en esta historia es una subtrama muy muy secundaria con una importancia mínima. No es un romantasy para nada, ni falta que le hace para mantenerte enganchada.
Con respecto a la ambientación, nos encontramos en Londres en pleno siglo XIX, en un mundo donde los sangre negra (brujos) conviven con los sangre roja (humanos) para dar fiestas y escalar en su posición social pero ocultando sus poderes por miedo a las represalias.
El worldbuilding en general es muy muy sencillo, tanto que podría leerlo cualquier persona que no lea habitualmente libros de fantasía, porque lo que importa no es el sistema de magia, sino descubrir al asesino.
El ritmo es ágil porque al querer obtener respuestas hace que la lectura sea constante. También hay acción aunque las peleas no sean el modus operandi principal para conseguir pistas, pero haberlas hailas.
Además, la pluma de la escritora es muy fácil de leer y eso hace que visualices muy bien lo que está pasando.
Los personajes también me han gustado mucho porque están bien construídos y tienen historia propia y evolución.
Eliza es genial. No es la típica heroína super poderosa elegida por la alineación de los astros para salvar al mundo mientras deslumbra con su belleza, más bien es todo lo contrario. La expulsan del colegio por gamberra, se le da mal la magia, no le gusta el mundo que le ha tocado vivir, y pese a ser la hija de los brujos más poderosos de su tiempo, ella es bastante mediocre y está en contra de todas las normas y el postureo de los de su especie.
Tampoco es la más guapa ni la más lista, es bastante mediocre en todo. Eso sí, a valiente, a rebelde y a temeraria no le gana nadie.
Los secundarios también están muy bien porque son relevantes no solo para la prota sino también para la propia historia.
Me han gustado mucho porque tienen su recorrido y su arco de personaje que crece y evoluciona. No se centra solo en Eliza. Hay algunos que tienen tanto mundo detrás que me han sorprendido mucho.
Y al tratarse de un argumento donde tenemos que encontrar al malo y saber por qué hace lo que hace, hay plot twist durante todo el libro que te hacen creer una cosa, luego otra, te despistan, te marean y hacen que hasta el final dudes hasta de tí misma.
Porque sí, hasta el final no tienes todas las piezas necesarias para construir el puzzle, y cuando ya está montado y lo ves, dices…”ahhhh claro… ya lo sabía” (pero es una mentira que nadie se cree).
El desenlace de esta historia queda muy bien cerrado y podría ser autoconclusivo, peeero hay un personaje que ha despertado toda mi curiosidad y que es el protagonista del siguiente libro. Ni qué decir tiene que ya estoy deseando saber lo que tiene que contar.



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