Sinopsis

Romance. Asesinatos. Caos.

Todo asesino en serie necesita un amigo.

Todo juego necesita un ganador.

Cuando un encuentro fortuito da lugar a una amistad improbable, los asesinos rivales Sloane y Rowan encuentran algo difícil de alcanzar: la afinidad de dos almas negras que disfrutan matando a otros asesinos en serie.

Desde un pequeño pueblo de West Virginia hasta la lujosa California, y desde el centro de Boston hasta la Texas rural, los dos cazadores se enfrentan en una competición anual: la caza de otros asesinos en serie, un juego que los enfrenta a los monstruos más peligrosos del país.

Pero a medida que su amistad se va transformando en algo más, los fantasmas que dejan a su paso les siguen de cerca, dispuestos a reclamar mucho más que su recien descubierto amor.

¿Podrán Rowan y Sloane salir de la tumba que se han cavado? ¿O habrán encontrado, al fin, a su digno rival y alma gemela?

¿Por qué lo he leído?

Cuando elegí este libro estaba a punto de embarcar en un vuelo de 15 horas. Necesitaba algo ágil y divertido para entretenerme durante tanto tiempo, y la premisa que leí prometía eso y mucho más. 

Reseña

Rowan y Sloane parecen dos personas normales pero ambos tienen la misma  afición, asesinar a asesinos en serie. 

Ese tipo de hobbies no son de los que se comparte con cualquiera, por eso, cuando se conocen salta la chispa entre ellos y deciden hacer una competición anual para ver quién de los dos es mejor cazador.

O sea, un rivals to lovers de dos raritos que les gusta matar gente.

La trama no tiene mucho misterio porque básicamente va de cómo se conocen y surge el amor en circunstancias altamente cuestionables.

No hay que encontrar a nadie, ni tienen que escapar, ni resolver ningún misterio. Básicamente pasan las páginas mientras se dan cuenta que están enamorados, pero eso ni siquiera es una sorpresa para los lectores, porque ya en el capítulo uno se gustan y al tener el POV de los dos, no sorprenden sus sentimientos.

O sea, el romance como tal es poco interesante.

Lo que puede ser más curioso, aunque en mi opinión se queda corto, son las situaciones anormales que viven. Creo que podrían sacar mucho más partido de las competiciones y desarrollarlas más para generar por lo menos algo de intriga y acción.

Se supone que ambos son super famosos dentro del gremio de asesinos y en realidad, ninguno de los dos demuestra ser especialmente bueno.

Las escenas spicy son bastante explícitas y acordes a un dark romance, así que me han gustado en el contexto de la historia.

Al ser una historia contemporánea, la ambientación no tiene demasiados detalles, pero se podría desarrollar mucho más, sobre todo para entender el mundo interno de los protagonistas, porque no son personajes con una psicología al uso. 

Se lee rápido porque no es muy largo y todo son diálogos con piques entre ellos, así que el ritmo es ágil y no hay que pensar demasiado, por lo que no es una lectura que dure demasiado aunque no enganche ni sea adictiva.

Los personajes son un quiero y no puedo que aparentan una cosa pero sus acciones demuestran todo lo contrario. Me han parecido incongruentes y pierden fuerza conforme pasan los capítulos.

Se supone que son asesinos despiadados que matan por disfrute y porque están loquísimos, pero yo eso no lo he visto por ningún lado. Me han parecido dos adolescentes algo inadaptados pero bastante normativos.

Tampoco he visto que se quieran porque nadie más entiende esa afición por la sangre como ellos, ni ven el asesinato como un arte y por eso están hechos el uno para el otro. 

Lo único que siento que tienen en común es que ambos tienen un pasado duro, del que tampoco sabemos demasiado y que por eso la vida les ha hecho ser así.

Su relación es poco interesante porque desde el primer momento en el que se ven se gustan y la tensión que hay entre ellos es forzada porque no sorprende.

Los plot twist, sinceramente, no sé cuales son. Hay un giro al final que me ha generado un poco de tensión pero el suspense dura menos de un capítulo porque se resuelve super rápido, así que es bastante lineal en cuanto a las sorpresas.

Y el final es ñoño. Sí, chicas, ñoño. ¿Pero no es un dark romance de asesinos? ¿cómo puede ser cursi? Pues no sé hijas mías, preguntadle a la autora, porque a mi había momentos que me estaba dando tango cringe que pensaba que iba a llorar algodón de azúcar y a vomitar arcoiris. 

La historia podría ser autoconclusiva perfectamente, y para mí así va a ser, pero dejan un subtrama abierta que da pie a continuar, pero carece totalmente de interés para mi.

En general es un libro que me ha dado mucha rabia porque tenía un premisa buenísima que me llamaba mucho la atención, pero que el hype y el marketing vendieron una cosa que no es.

Se supone que se trata de un rivals to lovers ingenioso de unos asesinos que matan asesinos y compiten entre ellos para ver quien es el mejor. 

Al principio me parecía original, pero conforme iba pasando las páginas, la trama perdió interés y tanto los personajes como sus salidas de tono comenzaron a hacerse previsibles y algo absurdas. 

Me esperaba mucho más de esta historia porque decían que era sarcástica y divertida, y aunque no está mal si no necesitas pensar, para mi ha sido un quiero y no puedo repetitivo e incongruente.

Y vosotros, ¿Lo habéis leído? ¿Qué os ha parecido? Os leemos en comentarios y en nuestras redes sociales.

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